La práctica del input
comprensible se aplica en los métodos activos de la enseñanza de
lenguas. Input es, de hecho, un término perteneciente a la jerga informática
que viene a significar toda entrada nueva de información.
Ahora bien, los estudiantes
se enfrenta al aprendizaje de un idioma con varios tipos de recursos
(físicos, intelectuales, de cultura general, etc) así como -con el tiempo- con
el conocimiento siempre creciente del idioma en cuestión. La práctica del input
comprensible consiste en aprovechar todos esos recursos para que el alumno
deduzca de manera activa y personal el significado de una nueva palabra o estructura gramatical.
Por ejemplo, si en clase se han
visto las palabras αἴλουρος
(gato), τράπεζα
(mesa) y
ἐστι (está),
el profesor puede enseñar una imagen de un gato sobre una mesa y
decir
ὁ
αἴλουρος ἐπὶ τῆς τραπέζης ἐστίν.
y el
alumno puede deducir sin problemas que ἐπὶ
significa sobre.
La
práctica que hemos hecho en clase de enseñar un libro y decir
βιβλίον, enseñar
un mapa del Ática y decir Ἀττική,
etc también responde a esta filosofía.
Como se ve en la frase anterior, está
claro que el input comprensible debe introducirse de uno en uno para
que el alumno sea capaz de deducir su significado. Por otro lado, si
el profesor se limitara a decir que ἐπί
significa sobre, sería una simple práctica
de input (como si el alumno fuera una máquina a la que se le
introduce un dato), típico de una enseñanza teórico-gramaticista
(en desuso en la didáctica de idiomas, excepto en la del griego y latín.)
La
práctica del input comprensible hace innecesario el uso del
diccionario de manera sistemática y la práctica de ejercicios de
repaso, porque en el proceso de aprendizaje el alumno está haciendo ya uso y repaso continuo de todo los recursos que ha ido asimilando. En
esta práctica didáctica es tan importante aprender lo nuevo como no
olvidar lo aprendido y eso se logra convirtiendo el repaso en el método de aprendizaje. Son también importantes los ejercicios para
asentar los nuevos conocimientos (sobre cómo tienen que ser estos
ejercicios, en otra entrada).
Este
tipo
de didáctica se hizo conocida con la serie de métodos para lenguas
modernas publicadas por el Instituto
para el método natural
de
Copenhague, bajo la dirección de Arthur M. Jensen.
En esta página podéis descargar los métodos de francés, inglés,
español y alemán que responden a esta filosofía.
Esta
misma editorial editó también un método con las mismas
características para aprender latín Lingua Latina per se
Illustrata, que podéis ver aquí. Por desgracia, no se ha escrito
todavía un método tal para griego clásico.